¿Ya estás registrado?
Entra
¿Algo que quieras decirnos?
Biblioteca
Aprendí a leer temprano,
y temprano también entré
a la biblioteca de mis padres.
No podía haber otro lugar
más intrigante y seductor
en la casa. No lo había.
El saber del mundo estaba
allí. Concentrado en pequeños
volúmenes de ediciones baratas.
Recuerdo las editoriales:
Eudeba, Losada, Emecé,
mostrandome a Borges, y a Guillén.
No sabía quienes eran, pero
me llamaban. Uno con un
volumen sobre seres imaginarios.
El otro no decía nada inteligible
pero el ritmo seducía en dos
palabras: Sóngoro cosongo.
No había otros libros que me
llamaran como esos. No hubo
ni habrá, otra experiencia como esa:
tener seis años y descubrir la poesía,
el ritmo y la belleza. Cuando uno es
joven lo es también el mundo.
0 | 159 | 0 |
![]() |
![]() |
![]() |