hemos asistido con perplejidad

 al parón de una máquina inmensa

, al frenazo de un cuerpo

de locas proporciones

que ha derrapado por el espacio

dedicando un tiempo

a gastar su inercia

, a dejar de moverse

, a llegar al cero completo

; en esa ralentización

hemos vivido

situaciones fuera de lo corriente

: muerte en pantallas

, funerales online

, conciertos desde el sofá

, bodas aplazadas

, nacimientos en la distancia

, procesiones y fuegos cancelados

; y ahora viene el rebote

: la pelota se comprime

, hay una transferencia de velocidades

, pero hay inercias que se pierden

y preguntas inquietantes

: ¿volveremos a las cotas anteriores

?, ¿querremos restaurarlo todo

como estaba

?